Silvia Marchiori es una consagrada italiana del Regnum Christi que actualmente se encuentra en el primer año del periodo de formación, estudiando Teología en la Universidad de San Dámaso, en Madrid. Se consagró el año pasado, y ha sido catequista de cuatro alumnas que se han preparado para su confirmación -y una de ellas también para su Primera Comunión-, en la Universidad Francisco de Vitoria. El sacramento lo recibieron del 6 de mayo de 2022, en la Catedral de La Almudena, de manos del Cardenal Osoro. Como catequista de adultos, nos cuenta que “es impresionante cómo todas las chicas decidieron emprender este camino y conocer y acercarse a Dios” siendo ya adultas.

Se trata de una experiencia de fe diferente a la suya: “Vengo de una familia cristiana católica practicante, donde desde pequeña me transmitieron los valores importantes, y durante toda mi infancia y adolescencia viví mi fe con el movimiento de la Acción Católica”. De hecho, ella conoció el Regnum Christi siendo mayor, después de sus estudios universitarios y de su primera experiencia laboral: su madrina conoció a un legionario en una peregrinación a Medjugorje y a su regreso, “quiso que le conociera, y desde ese momento, el Regnum Christi empezó a formar parte de mi vida”.

Es impresionante cómo todas las chicas que decidieron emprender este camino ellas mismas decidieron que querían conocer y acercarse a Dios. Cada una de ellas por caminos completamente diferentes, pero hay dos razones que les impulsaron a ello, ya sea a través de amigos, profesores, mujeres consagradas, sacerdotes o tras pasar por un periodo de sufrimiento en sus vidas.

La mayoría de ellas lo hacían simplemente por el testimonio de una persona que estaba constantemente presente para prestarles atención, escucharles y hacerles sentir queridas. Cuánto de importante es ser verdaderos testigos de ese Cristo que vive en cada corazón y en cada persona que encontramos.

“Para estas chicas, creo que acercarse a la fe y a la vida eclesiástica a esta edad supone ir a contracorriente”.

¿Qué supone en la vida de estas personas acercarse a la fe y a la vida de la Iglesia con estas edades?

Para estas chicas, creo que acercarse a la fe y a la vida eclesiástica a esta edad supone ir a contracorriente. No es fácil, en un mundo materialista y a veces egoísta, vivir la propia fe cuando implica salir de uno mismo y encontrarse con Dios y con el prójimo. Al mismo tiempo, es difícil en estos tiempos y en esta sociedad vivir la vida de la Iglesia, una Iglesia que a veces es frágil y juzgada.

Pero acercarse a la fe significa también darse cuenta de que todos somos hijos, hijos de un Padre bueno que desea relacionarse con cada persona.

¿Qué carencias y qué virtudes tienen estos adultos ante la fe?

Algunos defectos que puede tener un adulto ante la fe son el egoísmo, la superficialidad, la negación, el egocentrismo…

Y algunas virtudes podrían ser la fe, la esperanza, la caridad…

Les acompañamos tratando de establecer una relación de confianza, de amistad y de saber que tienen delante una persona que siempre estará ahí para lo que más necesiten.

¿Cómo les acompañáis vosotros? ¿Es únicamente una catequesis o hay un acompañamiento más personal y de amistad?

Les acompañamos tratando de establecer una relación de confianza, de amistad y de saber que tienen delante una persona que siempre estará ahí para lo que más necesiten. Además, siempre tratamos de dar una atención personalizada a cada uno, preguntándoles qué es lo que más necesitan y comprender sus dificultades. Todo siempre respetando la libertad de la persona.

¿Qué es lo que más anhela una persona que se convierte siendo ya adulto? ¿Qué nos pueden enseñar a los demás?

Pues bien, lo que tanto desea una persona adulta al convertirse es conocer a Dios y establecer una relación personal con Él, tiene sed y necesidad de ser satisfecha. Casi siempre una persona que se convierte es porque ha tenido una experiencia de un Cristo vivo, que le ha salido de forma personal a su encuentro y, por tanto, no puede negar o rechazar este encuentro con Él.

Lo realmente importante es que el alumno pueda encontrar su carisma y su lugar en esta gran familia que es la Iglesia.

¿Les invitáis a conocer el Regnum Christi y otras realidades de la Iglesia?

Por supuesto que sí. Siempre a lo largo del año presentamos las varias actividades y realidades presentes en la Universidad, como el Regnum Christi, las actividades de pastoral universitaria etc… y siempre tratamos de transmitirles que vivir la fe solos es muy difícil y que siempre es importante estar acompañado, encontrar un director o una directora espiritual que te ayude a crecer en el camino de la fe. Finalmente, lo realmente importante es que el alumno pueda encontrar su carisma y su lugar en esta gran familia que es la Iglesia.

 

Este artículo fue publicado originalmente en Regnum Christi España.