La sección de jóvenes femenina de Caracas (Venezuela) se sumergió en los Ejercicios Espirituales ignacianos del 9 al 13 de febrero en la Casa de Espiritualidad Nazaret, acompañadas por el P. Enrique Dávila L.C, y las consagradas Claudia Espinosa y Ana Moriel.
Durante estos días, las participantes tuvieron la oportunidad de experimentar el silencio interior y conectarse con la experiencia del amor de Cristo a través del Espíritu Santo. El enfoque fue comprender que son hijas amadas de Dios y que siempre pueden regresar a casa.
La asistencia a estos ejercicios espirituales se percibió como una experiencia única, marcada por días de silencio y el acompañamiento del padre y las consagradas.
Paola Rigio, miembro del Regnum Christi de Caracas compartió su testimonio destacando la invitación de Jesús a mantener la mirada en Él
Para mí, estos Ejercicios Espirituales fueron una invitación por parte de Jesús a descubrir cómo Él me mira, a reconocer que soy un don que fue soñado, pensado, anhelado y creado por Él a medida. A no desesperarme, incluso cuando siempre voy buscando respuestas inmediatas, a conocerlo más a profundidad, a no alejarme de Él y a abandonarme a los pies de su madre para recibir su consuelo».
Estos ejercicios espirituales se presentaron como una recarga interior, un tiempo de intimidad con Dios, proporcionando a los participantes la energía y la inspiración necesarias para ser apóstoles en su vida cotidiana.
El testimonio de Paola Briceño, una participante de 17 años, resalta cómo estos Ejercicios transformaron su perspectiva sobre la oración, el perdón y la importancia de escuchar a Dios en el silencio. Señala que este tiempo de introspección la ayudó a comprender que la voluntad de Dios es perfecta y que siempre nos está guiando, incluso cuando nos perdemos en el camino de la vida.
En resumen, estos Ejercicios Espirituales fueron un espacio significativo para la renovación espiritual y el fortalecimiento de la conexión con la fe, dejando una huella duradera en la vida de quienes participaron.
Este artículo fue publicado originalmente por Regnum Christi Colombia-Venezuela.